Tomado de Yahoo/Noticias.MIAMI (Reuters) 13 Octubre 2008.- La tormenta tropical número 14 de la temporada 2008 de huracanes del Atlántico se debilitó rápidamente este lunes, pero otros dos sistemas tropicales se desarrollaron en el Caribe, amenazando Puerto Rico, las Islas Vírgenes y América Central.
La tormenta tropical Nana, que surgió el domingo a mitad de camino entre Cabo Verde y el Caribe, sucumbió por condiciones atmosféricas adversas y se debilitó a depresión tropical el lunes a la mañana.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos pronosticó que el fenómeno se disipará "en uno o dos días".
Mientras tanto, la depresión tropical número 15 de la temporada se formó alrededor de 545 kilómetros al sudoeste de San Juan, Puerto Rico, dijo el centro basado en Miami.
Se prevé que la depresión virará con dirección noroeste durante un tiempo antes de cobrar fuerza de tormenta tropical y ser bautizada Omar. Luego se dirigiría al noreste, cerca de Puerto Rico, y podría convertirse en un huracán en el Atlántico abierto.
Ni los restos de Nana ni la nueva depresión tropical se consideraban una amenaza para Estados Unidos o los campos petrolíferos del Golfo de México.
Sin embargo, un tercer sistema de clima tropical se desarrollaba en la costa de Nicaragua, en el oeste del Caribe, y podría afectar a América Central, la península mexicana de Yucatán, las Islas Caimán o el oeste de Cuba, dijo el centro de huracanes estadounidense.
Si este sistema se convirtiera en tormenta tropical, con vientos de al menos 63 kilómetros por hora, será bautizado Paloma.
La temporada de huracanes 2008 cumplió con los pronósticos de ser muy activa. Una temporada promedio genera diez tormentas, de las cuales seis llegan a la fuerza de huracán.
Estados Unidos, en particular, y los yacimientos petrolíferos costa fuera de Luisiana y Texas han estado en el ojo de la tormenta este año. El huracán Gustav azotó la costa de Nueva Orleans, la ciudad devastada por Katrina en el 2005, y el huracán Ike golpeó Houston.
También fue una temporada fatal para Haití, donde más de 800 personas perdieron su vida por las inundaciones que provocaron Fay, Gustav, Hanna y Ike, y una temporada negativa para Cuba, azotada por Gustav y Ike.
La tormenta tropical Nana, que surgió el domingo a mitad de camino entre Cabo Verde y el Caribe, sucumbió por condiciones atmosféricas adversas y se debilitó a depresión tropical el lunes a la mañana.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos pronosticó que el fenómeno se disipará "en uno o dos días".
Mientras tanto, la depresión tropical número 15 de la temporada se formó alrededor de 545 kilómetros al sudoeste de San Juan, Puerto Rico, dijo el centro basado en Miami.
Se prevé que la depresión virará con dirección noroeste durante un tiempo antes de cobrar fuerza de tormenta tropical y ser bautizada Omar. Luego se dirigiría al noreste, cerca de Puerto Rico, y podría convertirse en un huracán en el Atlántico abierto.
Ni los restos de Nana ni la nueva depresión tropical se consideraban una amenaza para Estados Unidos o los campos petrolíferos del Golfo de México.
Sin embargo, un tercer sistema de clima tropical se desarrollaba en la costa de Nicaragua, en el oeste del Caribe, y podría afectar a América Central, la península mexicana de Yucatán, las Islas Caimán o el oeste de Cuba, dijo el centro de huracanes estadounidense.
Si este sistema se convirtiera en tormenta tropical, con vientos de al menos 63 kilómetros por hora, será bautizado Paloma.
La temporada de huracanes 2008 cumplió con los pronósticos de ser muy activa. Una temporada promedio genera diez tormentas, de las cuales seis llegan a la fuerza de huracán.
Estados Unidos, en particular, y los yacimientos petrolíferos costa fuera de Luisiana y Texas han estado en el ojo de la tormenta este año. El huracán Gustav azotó la costa de Nueva Orleans, la ciudad devastada por Katrina en el 2005, y el huracán Ike golpeó Houston.
También fue una temporada fatal para Haití, donde más de 800 personas perdieron su vida por las inundaciones que provocaron Fay, Gustav, Hanna y Ike, y una temporada negativa para Cuba, azotada por Gustav y Ike.
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