Dice seguirá "ración del Boa"; Ve tímidas medidas LF

SANTO DOMINGO.- El presidente de la Asociación de Empresas Industriales de Herrera, Manuel Cabrera, aplaudió la focalización del subsidio al gas licuado de petróleo y el reforzamiento de la asistencia social a las capas más pobres, pero planteó la necesidad de disminuir más los emolumentos de los funcionarios a través de tarjetas de crédito, dietas viáticos, gastos de combustibles, viajes y cobros por la participación en los consejos de instituciones estatales.

Al mismo tiempo, Cabrera definió como “tímidas” las medidas de reducción del gasto público anunciadas por el presidente Leonel Fernández, por lo que le exhortó a profundizar más la austeridad para que la economía resista los embates de la crisis petrolera, los altos precios de los alimentos y el dislocamiento de los mercados financieros.

El dirigente empresarial anunció que, desde esta semana, la AEIH instalará un observatorio o veeduría para dar seguimiento al cumplimiento de las medidas positivas dentro del plan de austeridad del gobierno y criticar constructivamente, con el respaldo de las propuestas, a aquellas que resulten deficitarias e impracticables.

Consideró que una reducción del 5% al 10% de los salarios superiores a los RD$150,000 tendría poco impacto en el ahorro público, debido a que se trata del 3% de los servidores estatales que generan altas erogaciones por otras vías que están fuera del salario ordinario. “Esa parte merece controles de parte del Ejecutivo”, manifestó.

Definió como inconcebible que, en una coyuntura en la que se impone la austeridad, el Estado tenga funcionarios que cobran portentosas sumas de dinero mensualmente en tres y cuatro instituciones, mientras se mantienen incólumes “viviendo de la ración del boa” decenas de subsecretarios y empleados consulares que poco aportan a la función pública.

En ese contexto, el presidente de la AEIH deploró que el gobernante decidiera congelar la nómina a diciembre de 2007 y no hacer una poda de las múltiples botellas que, desde su punto de vista, persisten en la plantilla del Estado.

Cabrera dijo que el Gobierno debe dejar claramente definido cuál es el ahorro neto que tendrá a partir de la racionalización de la inversión de capital, la reducción de los gastos en subsidios, la disminución de la inversión en publicidad y el recorte de los altos sueldos en la administración pública.
“Luce que en la administración pública seguirá habiendo mucha grasa, pues en el plan integral lanzado por el mandatario no se perciben iniciativas para reducir el consumo de combustibles. Por el contrario, parecería que queda flotando la idea de que mientras más hidrocarburos consumimos, más nos beneficiamos de Petrocaribe, lo cual es altamente peligroso”, comentó el presidente de la AEIH.

De acuerdo con el empresario, es importante entender que el ahorro de un 10% en la factura petrolera representaría unos US$520 millones, o sea RD$17,940 millones anuales, más de la mitad del presupuesto dedicado a la educación.

Dijo que el presidente Fernández planteó con suficiente claridad la situación amenazante que vive la economía del país, adoptó decisiones interesantes en lo que respecta a la producción de alimentos y al reordenamiento de ciertos subsidios, pero definió como decepcionante que nada concretara respecto a la transferencia de fondos públicos al sector eléctrico.

“Los recortes de gastos y el desmonte de los subsidios debieron merecer mejor suerte, ser más profundos para generar un ahorro que puede redireccionarse a la educación y la salud, dos aspectos sociales determinantes para que el país puede ser competitivo”, adujo Cabrera.