Tomado de LasMayores.com/Mario Emilio GuerreroSAN JUAN. -- Para Felipe Alou, las dos derrotas del seleccionado dominicano ante el débil equipo de Holanda vienen a demostrar que en el béisbol cualquier cosa puede suceder.
"Después de tantos años y tantas ligas en que hemos jugado y dirigido, podríamos creer que lo hemos visto todo, pero la actuación del conjunto holandés en esta primera ronda nos enseña que estamos equivocados", manifestó Alou. Holanda derrotó a República Dominicana dos veces, la segunda este martes, para clasificar contra todos los pronósticos a la segunda ronda del Clásico Mundial de Béisbol 2009.
El último revés, una derrota 2-1 en once entradas, impidió al equipo quisqueyano poder avanzar más allá de la ronda preliminar, que en el marco del Grupo D, concluye el miércoles en el estadio Hiram Bithorn, de esta ciudad.
"Después de tantos años y tantas ligas en que hemos jugado y dirigido, podríamos creer que lo hemos visto todo, pero la actuación del conjunto holandés en esta primera ronda nos enseña que estamos equivocados", manifestó Alou. Holanda derrotó a República Dominicana dos veces, la segunda este martes, para clasificar contra todos los pronósticos a la segunda ronda del Clásico Mundial de Béisbol 2009.
El último revés, una derrota 2-1 en once entradas, impidió al equipo quisqueyano poder avanzar más allá de la ronda preliminar, que en el marco del Grupo D, concluye el miércoles en el estadio Hiram Bithorn, de esta ciudad.
El dirigente dominicano expresó que "lo que ha sucedido aquí es algo insospechado y que nadie se hubiera atrevido a predecir".
"Holanda ha jugado tres partidos extraordinarios, demostrando que la calidad del juego va en aumento en muchos países. Ellos han progreso enormemente, de eso no hay dudas".
Agregó que "a los peloteros de las islas caribeñas, ellos han añadido muy buenos jugadores nativos del continente, principalmente lanzadores talentosos".
"Holanda ha jugado tres partidos extraordinarios, demostrando que la calidad del juego va en aumento en muchos países. Ellos han progreso enormemente, de eso no hay dudas".
Agregó que "a los peloteros de las islas caribeñas, ellos han añadido muy buenos jugadores nativos del continente, principalmente lanzadores talentosos".
El encuentro del martes fue un espectacular duelo de pitcheo entre ambas novenas, que llegó empatado a cero carreras en diez entradas.
Felipe recordó la época en que los dominicanos iban a Curazao y Aruba con equipos integrados por muchachos y ganaban con facilidad contra cualquier equipo.
"Eso ya no es así y tenemos que felicitar a esta gente que ha celebrado un gran evento", proclamó.
Felipe recordó la época en que los dominicanos iban a Curazao y Aruba con equipos integrados por muchachos y ganaban con facilidad contra cualquier equipo.
"Eso ya no es así y tenemos que felicitar a esta gente que ha celebrado un gran evento", proclamó.
Los dominicanos, lo mismo que en el primer choque contra los holandeses, dejaron una enorme cantidad de jugadores en circulación y se mantuvieron amenazando en cada entrada sin poder ligar.
Ubaldo Jiménez inició por el conjunto quisqueyano y ponchó a diez bateadores en cuatro entradas, un nuevo récord para un abridor en la historia del Clásico.
Jiménez, Pedro Martínez, Tony Peña, Rafael Pérez y Dámaso Marte, trabajaron en los diez primeros episodios y limitaron a los holandeses a sólo 3 hits, todos sencillos, mientras ponchaban a 14 bateadores.
Por su parte, los pitchers de los Países Bajos navegaron en aguas tormentosas en esas mismas entradas, pero siempre lograron salir ilesos de los problemas.
Catorce hombres en circulación dejó el seleccionado dominicano, que en el encuentro disparó 7 hits, recibió 7 boletos y le golpearon un hombre, pero sólo pudo anotar una carrera que fue sucia.
Tom Stuifbergen, el abridor y los relevistas Alexander Smit, Rob Cordemans, Dennis Neuman, Diego Markwell y Leon Boyd, desfilaron lanzarndo por Holanda y lograron convertir en realidad el pase de su selección a la ronda de Miami.
Los dominicanos fueron los primeros en anotar, en la parte de arriba del décimo primer inning, después de dos outs, por una transferencia a José Reyes y un error del jardinero derecho, en batazo de José Bautista.
Sin embargo, los holandeses, en el final de ese episodio, atacaron al cerrador Carlos Mármol, con un doble y un sencillo, que combinados con errores del propio lanzador y del inicialista Willy Aybar, decretó la victoria con marcador 2-1.
Ubaldo Jiménez inició por el conjunto quisqueyano y ponchó a diez bateadores en cuatro entradas, un nuevo récord para un abridor en la historia del Clásico.
Jiménez, Pedro Martínez, Tony Peña, Rafael Pérez y Dámaso Marte, trabajaron en los diez primeros episodios y limitaron a los holandeses a sólo 3 hits, todos sencillos, mientras ponchaban a 14 bateadores.
Por su parte, los pitchers de los Países Bajos navegaron en aguas tormentosas en esas mismas entradas, pero siempre lograron salir ilesos de los problemas.
Catorce hombres en circulación dejó el seleccionado dominicano, que en el encuentro disparó 7 hits, recibió 7 boletos y le golpearon un hombre, pero sólo pudo anotar una carrera que fue sucia.
Tom Stuifbergen, el abridor y los relevistas Alexander Smit, Rob Cordemans, Dennis Neuman, Diego Markwell y Leon Boyd, desfilaron lanzarndo por Holanda y lograron convertir en realidad el pase de su selección a la ronda de Miami.
Los dominicanos fueron los primeros en anotar, en la parte de arriba del décimo primer inning, después de dos outs, por una transferencia a José Reyes y un error del jardinero derecho, en batazo de José Bautista.
Sin embargo, los holandeses, en el final de ese episodio, atacaron al cerrador Carlos Mármol, con un doble y un sencillo, que combinados con errores del propio lanzador y del inicialista Willy Aybar, decretó la victoria con marcador 2-1.
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