Al agente policial les fueron ocupadas 3 pistolas con sus cargadores y tiros 9mm, además porciones de cocaína, balanza e instrumentos para manipular la droga. Asimismo la DNCD, ocupó , en Fundación, Baní, tres paquetes de cocaína que narcotraficantes dejaron abandonados ante la presencia de los efectivos antinarcóticos.SANTO DOMINGO.- Un agente de la Policía Nacional fue capturado este lunes en Baní con tres pistolas y una gran cantidad de porciones de cocaína, así como una balanza e instrumentos para manipular ese tipo de narcótico, mientras en la misma ciudad fueron ocupados tres paquetes del mismo polvo blanco que fueron abandonados por varios individuos, informó la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).
El policía detenido es Víctor Ernesto Melo Ciprián, alias Manenga, residente en la calle Club de Leones del sector La Nevera, en Baní, de quien se dijo es un reconocido distribuidor de narcóticos, asunto que le fue notificado al Jefe de la Policía Nacional, mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, para que disponga la expulsión de las filas de este sujeto “para luego proceder a someterlo a la justicia”.
El presidente de la DNCD, mayor general Gilberto Delgado Valdez, dijo que se recibió la información de Melo Ciprián, de 35 años, de que estaba dedicado a actividades delictivas, por lo que “se procedió a coordinar con el Ministerio Público para allanar su vivienda, encontrando en ella las citadas armas y una considerable cantidad de porciones de cocaína y marihuana, listas para ser vendidas”. El agente ya fue cancelado.
Las armas ocupadas al policía, de acuerdo al informe de la DNCD, son las pistolas marcas Arcus, Browning y Carandai, todas 9 milímetros con sus respectivos cargadores y las cápsulas correspondientes. Les fueron ocupados, además, el carnet y la placa números 41364 y 010406, respectivamente, que les acreditan como miembro de la uniformada, dijo el jefe antidrogas, hablando a través de su vocero, el periodista Roberto Lebrón.
El agente es interrogado para que explique por qué tenía esas armas en su poder, mientras este lunes se procedía a depurarlas para determinar a nombre quienes están las mismas. Delgado Valdez lamentó que un miembro de las Fuerzas Armadas o de la Policía se involucre en este tipo de actividad, “sabiendo que sus superiores son drásticas e implacables cuando se producen eventos de esta naturaleza”.
Y sobre los tres paquetes ocupados por la DNCD, también en Baní, el jefe antinarcóticos dijo que fueron abandonados por varios sujetos en el poblado de Fundación, al notar la presencia de los miembros de la Inspectoría con asiento en esa ciudad. Agregó, que escaparon en una jeepeta Mitsubishi Montero, color negro, sin placa. La vigilancia se mantiene en la zona en procura de detener a los implicados en la frustrada operación de narcotráfico.
De otro lado, en la provincia de La Vega fue capturado uno de los individuos que controlaba el negocio de narcóticos, en puntos de distribución y en ‘delibery’, en un allanamiento en el que fueron ocupadas decenas de porciones de cocaína, cuando el sujeto se preparaba para personalmente llevarlas a su destino.
Roberto Antonio Núñez Yciano, alias Ñego, fue sorprendido en la calle 4, sin número, del sector Primavera, hasta donde llegó la DNCD acompañada del fiscal adjunto, Agustín de la Cruz, para ejecutar una orden dictada por un tribunal de esta jurisdicción. Ñúñez Yciano, de 41 años, tiene cinco fichas por narcotráfico, de acuerdo a un comunicado de la agencia antidrogas, en el que dice que se trata de un hombre muy violento.
Era vigilado desde hace meses, pero no fue hasta el sábado en la mañana cuando fue posible arrestarlo con droga en su poder. Había estado preso en otras siete ocasiones, pero lograba maniobrar con sus abogados para salir en libertad y seguir “en su perniciosa actividad de vender estupefacientes”. Se dijo que este lunes diligenciaba salir nuevamente de prisión mediante el pago de una fianza.
Indicó, que esa persona fue registrada por primera vez en los archivos de la DNCD en mayo de 2000, logrando salir de prisión, pero volvió a caer en manos de los agentes antinarcóticos en febrero de 2002, en febrero de 2005 y en marco de 2006. Salió de prisión sin contratiempo, pero ahora fue detenido en presencia de un fiscal adjunto y con la droga en su poder, elemento observado por la ley para su enjuiciamiento.
Es socio de los nombrados Juan Ernesto Hernández Ramírez y Heriberto Núñez Montero, alias Mañaño, ambos perseguidos por cargos similares.
El jefe antidrogas señaló, que se trata de individuos que se desplazan armados y en múltiples ocasiones han tiroteado a la DNCD y a la Policía, cuando los miembros de estas instituciones han tratado de detenerlos, con y sin órdenes de arresto emanadas de las autoridades competentes.
El policía detenido es Víctor Ernesto Melo Ciprián, alias Manenga, residente en la calle Club de Leones del sector La Nevera, en Baní, de quien se dijo es un reconocido distribuidor de narcóticos, asunto que le fue notificado al Jefe de la Policía Nacional, mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, para que disponga la expulsión de las filas de este sujeto “para luego proceder a someterlo a la justicia”.
El presidente de la DNCD, mayor general Gilberto Delgado Valdez, dijo que se recibió la información de Melo Ciprián, de 35 años, de que estaba dedicado a actividades delictivas, por lo que “se procedió a coordinar con el Ministerio Público para allanar su vivienda, encontrando en ella las citadas armas y una considerable cantidad de porciones de cocaína y marihuana, listas para ser vendidas”. El agente ya fue cancelado.
Las armas ocupadas al policía, de acuerdo al informe de la DNCD, son las pistolas marcas Arcus, Browning y Carandai, todas 9 milímetros con sus respectivos cargadores y las cápsulas correspondientes. Les fueron ocupados, además, el carnet y la placa números 41364 y 010406, respectivamente, que les acreditan como miembro de la uniformada, dijo el jefe antidrogas, hablando a través de su vocero, el periodista Roberto Lebrón.
El agente es interrogado para que explique por qué tenía esas armas en su poder, mientras este lunes se procedía a depurarlas para determinar a nombre quienes están las mismas. Delgado Valdez lamentó que un miembro de las Fuerzas Armadas o de la Policía se involucre en este tipo de actividad, “sabiendo que sus superiores son drásticas e implacables cuando se producen eventos de esta naturaleza”.
Y sobre los tres paquetes ocupados por la DNCD, también en Baní, el jefe antinarcóticos dijo que fueron abandonados por varios sujetos en el poblado de Fundación, al notar la presencia de los miembros de la Inspectoría con asiento en esa ciudad. Agregó, que escaparon en una jeepeta Mitsubishi Montero, color negro, sin placa. La vigilancia se mantiene en la zona en procura de detener a los implicados en la frustrada operación de narcotráfico.
De otro lado, en la provincia de La Vega fue capturado uno de los individuos que controlaba el negocio de narcóticos, en puntos de distribución y en ‘delibery’, en un allanamiento en el que fueron ocupadas decenas de porciones de cocaína, cuando el sujeto se preparaba para personalmente llevarlas a su destino.
Roberto Antonio Núñez Yciano, alias Ñego, fue sorprendido en la calle 4, sin número, del sector Primavera, hasta donde llegó la DNCD acompañada del fiscal adjunto, Agustín de la Cruz, para ejecutar una orden dictada por un tribunal de esta jurisdicción. Ñúñez Yciano, de 41 años, tiene cinco fichas por narcotráfico, de acuerdo a un comunicado de la agencia antidrogas, en el que dice que se trata de un hombre muy violento.
Era vigilado desde hace meses, pero no fue hasta el sábado en la mañana cuando fue posible arrestarlo con droga en su poder. Había estado preso en otras siete ocasiones, pero lograba maniobrar con sus abogados para salir en libertad y seguir “en su perniciosa actividad de vender estupefacientes”. Se dijo que este lunes diligenciaba salir nuevamente de prisión mediante el pago de una fianza.
Indicó, que esa persona fue registrada por primera vez en los archivos de la DNCD en mayo de 2000, logrando salir de prisión, pero volvió a caer en manos de los agentes antinarcóticos en febrero de 2002, en febrero de 2005 y en marco de 2006. Salió de prisión sin contratiempo, pero ahora fue detenido en presencia de un fiscal adjunto y con la droga en su poder, elemento observado por la ley para su enjuiciamiento.
Es socio de los nombrados Juan Ernesto Hernández Ramírez y Heriberto Núñez Montero, alias Mañaño, ambos perseguidos por cargos similares.
El jefe antidrogas señaló, que se trata de individuos que se desplazan armados y en múltiples ocasiones han tiroteado a la DNCD y a la Policía, cuando los miembros de estas instituciones han tratado de detenerlos, con y sin órdenes de arresto emanadas de las autoridades competentes.
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